ATENCIÓN, TEMA SENSIBLE
#opinion Institucionalidad en Fuga, en Santo Domingo Este.
Desde los inicios se sabe mucha información y por «temor» a ser mal interpretado, cruzar las líneas dizque éticas, uno, hace silencio.
Eliezer Nolasco, aquel que con arrogancia juraba sería el «asistente» del alcalde, quedó como el primero «despreciado» y en su lugar, parece, el alcalde colocó a su esposa, como signo de que confía en muy, pero que muy pocas personas y en uno de los que nunca confió, fue en el gobernador del Faro a Colón. La oficina de un asistente esta ocupada pero no con un ente institucionalmente reconocido.
Hace mucho tiempo, en realidad, todo el tiempo, se ha conocido que la esposa del Alcalde «manda» en el ayuntamiento como si fuera él y la gente le «hace caso» y hasta teme, como si fuera él.
El rol del Alcalde es institucional, la administración pública no funciona como una monarquía y, por ejemplo, la esposa del presidente no acude a ningún escenario institucional en su sustitución, sino la vice Raquel Peña, no Arbaje.
En los ayuntamientos al alcalde lo sustituye la vice alcaldesa en este caso, si ambos faltan, el secretario general y en la ausencia de estos tres, el presidente de la Sala Capitular, nunca el conyugue.
No se trata, por cierto, de inmiscuirse en la vida de las personas, se trata de exponer cómo se está manejando esta administración municipal en Santo Domingo Este, con 0 protocolo, respeto a la institucionalidad, a las leyes, a lo establecido.
En la recogida de un reciente premio por la labor realizada por la gestión de Manuel Jiménez, por cierto, en temas de deportes y cultura, al Alcalde lo sustituyó la esposa, lo cual constituye una afrenta terrible y una falta de respeto a la vice alcaldesa que, si tuviera vergüenza, hace ato debió renunciar por lo insignificante de su papel al desasignarle todo poder concerniente a su rol.
Claro está, nadie estaría en contra que «tu pareja», en la que más confías, sea tu confidente, pues desgraciadamente, a veces se posee poco circulo de amigos y confiables, como parece ser el caso, pero como los ayuntamientos se rigen por la ley y aunque la vice se prestara y aplaudiera la llegada de su propio verdugo, hay momentos en que la verdad debe ser dicha y denunciar la falta de institucionalidad y el irrespeto constante a lo establecido que pasa, sucede, acontece, delante de todos y sin que los regidores, los llamados a fiscalizar, digan «esta boca es mía», esperando a cuando será la próxima temporada de «lluvia».
x.com/@fdo_buitrago
19/5/2025
